Rúbricas 11

Rúbricas XI Ciencias de la Salud en la Ibero Puebla 81 y la talla de niños, adolescentes o adultos mayores, principalmente, con metodologías bien definidas y validadas nacional e internacionalmente. El camino a partir de entonces se empezó a recorrer. Muchos años han pasado y las experiencias en comunidades han sido diversas, logrando siempre aprendizajes positivos para la formación profesional y humanizante de los estudiantes, que son el principio y fin del quehacer universitario. Algunos esfuerzos inminentes se hicieron para adentrarse a trabajar en comunidades de la zona de la Sierra Negra de Oaxaca, sin lograr concretar algo. Más adelante se buscaron espacios cerca del campus: San Andrés y San Pedro Cholula, así como Tlaxcalancingo. El trabajo realizado en estos lugares hacía alusión a la creación de Sistemas de Vigilancia Alimentaria y Nutricia, conocidos como SISVAN, los cuales tuvieron algunos frutos como evaluaciones de grandes comunidades y sus respectivas estrategias para mejorar la alimentación y aprovechamiento de recursos de las familias. Ámbitos de intervención Actualmente, las experiencias son muchas y han dado fruto; aquí se mencionan a grandes rasgos los cuatro pilares en los que se ha consolidado el trabajo comunitario en nutrición desde la Ibero Puebla: 1. Atención comunitaria al interior de la Universidad 2. Atención comunitaria a grupos de mujeres 3. Atención en el ámbito escolar 4. Atención en el ámbito laboral. A continuación, se analizarán algunas de las intervenciones que se han sistematizado. Atención comunitaria al interior de la Universidad Hace cerca de cuatro años, en conjunto con el servicio médico, se detectó, gracias a los exámenes periódicos al personal de la Ibero, que el grupo de Mantenimiento presentaba riesgo de enfermedad cardiovascular elevado y algunos otros problemas que a largo plazo derivarían en enfermedades crónico-degenerativas. En consecuencia, se puso en marcha un proyecto para mejorar la salud de dicho grupo; después de realizar diagnósticos intensivos en cuestiones de antropometría, pruebas bioquímicas, exploración clínica y dietética, así como de estilo de vida, se han llevado a cabo acciones que abarcan desde la consulta individual hasta talleres, pláticas y programas a mediano plazo, basados en la promoción del autocuidado, de la mejora de la selección de alimentos y al establecimiento de metas en salud, logrando resultados significativos en cuanto a disminución de riesgos. Los contextos laboral, sociocultural y económico del grupo intervenido han resultado ser los mayores obstáculos para concretar el proyecto, pero se ha seguido trabajando de manera continua con propuestas hechas a “la medida” de la población. En la última intervención (primavera-otoño 2016) se hizo la adaptación de un programa internacional en el que se han basado las políticas de prevención y tratamiento de enfermedades crónico-degenerativas en el último sexenio: un “programa de 5 pasos” basado más que en un plan de alimentación, en una serie de metas que buscan cambiar el comportamiento relacionado con el estilo de vida. La inclusión en el estudio de aspectos como nivel socioeconómico, aprovechamiento de los alimentos y distribución de la economía doméstica han sido muy acertados para lograr resultados favorables. Hace cerca de cuatro años, en conjunto con el servicio médico, se detectó, gracias a los exámenes periódicos al personal de la Ibero, que el grupo de Mantenimiento presentaba riesgo de enfermedad cardiovascular elevado y algunos otros problemas que a largo plazo derivarían en enfermedades crónicodegenerativas.

RkJQdWJsaXNoZXIy MTY4MjU3