Rúbricas XIII Derechos humanos en Puebla 65 Al menos también es por temor. Antes, la gente tenía más miedo que hoy porque […], por decir, aquella persona que tiene el cacicazgo tiene el liderazgo, o sea es el más fuerte; entonces, como quien dice, te tratan de atemorizar, que no puedas hablar como ciudadana porque si tú hablas dicen “no, pues la vamos a quebrar” […], “es vieja ¿qué vino a hacer?” o “¿quién es ella para que venga y trate de…?”; “le vamos a quebrar las patas”; así decían. Entonces, por ese temor la gente siempre vive con miedo de que no podemos hablar, pero sí podemos hablar (GFSEG1). De lo anterior se evidencia la necesidad latente de incluir la perspectiva de género y comunitaria en la construcción de la seguridad ciudadana, sobre todo porque las condiciones de victimización afectan de forma diferenciada a hombres y mujeres, lo que para ellas representa un obstáculo para la libertad, la igualdad y el desarrollo. - Seguridad privada Como bien señala la CIDH, las instituciones estatales son las únicas responsables de garantizar seguridad a las poblaciones, de ahí que las empresas privadas de seguridad únicamente deberían proporcionar “servicios de seguridad o custodia de bienes y valores” (2009:31). Sin embargo, llama la atención que este servicio, en el caso de Puebla, se amplía a la “Seguridad privada a las personas”, que “consiste en la protección, custodia, salvaguarda, defensa de la vida y de la integridad corporal del prestatario” (artículo 15, fracción V, LSPEP). De esta forma se puede avizorar que el crecimiento acelerado de estas empresas en América Latina (CIDH, 2009) también se presenta en el estado de Puebla como una forma de respuesta ante la percepción de inseguridad ciudadana. A través del sistema INFOMEX, con respuesta de folio 00179017, se informa la cantidad de empresas registradas en padrón de prestadores de servicios, así como el número de éstas que se dieron de alta por año. Si bien algunos datos son distintos a lo reportado en los Informes de gobierno, considerando esta respuesta oficial que se expone en la gráfica 2, es posible observar que, en efecto, el porcentaje de empresas privadas fue en aumento y que el alta anual registró los mayores porcentajes en 2014 y 2015 (Gráfica 2). El incremento de este servicio y su alta demanda en el mercado pueden evidenciar que la seguridad privatizada puede adquirirse como un producto, lo que la hace exclusiva para ciertos sectores y desvincula al Estado de la protección efectiva de los derechos humanos, sobre todo de su tarea de prevenir la violencia y los delitos para toda la población (CIDH, 2009). La perspectiva de género es necesaria en la seguridad porque las condiciones de victimización afectan de forma diferenciada a hombres y mujeres. Gráfica 2. Número de empresas registradas, prestadoras de servicios de seguridad privada 300 250 200 150 100 50 0 Año 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 Empresas registradas 101 114 125 129 132 136 142 151 160 192 242 271 Alta anual 0 13 11 4 3 4 6 9 9 32 50 29 Fuente: INFOMEX. Folio 00179017. Número de empresas registradas, prestadoras de servicios de seguridad privada
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