20 empresas que seguirán operando. Aunque la crisis afecta a todas ellas, el impacto será mucho mayor en el caso de las microempresas y las pymes, por su peso en la estructura empresarial de la región, que se traducirá en grandes cierres de empresas y pérdidas de puestos de trabajo. La contracción del empleo doméstico con hogares como empleadores ha implicado también un severo golpe para gran cantidad de familias vulnerables a quienes pertenecen muchas de las trabajadoras que se desempeñan en estas labores (onu, Mujeres, 2020). Se estima que 34.2 % del empleo formal y 24.6 % del pib de la región corresponden a sectores fuertemente afectados por la crisis derivada de la pandemia. Más aún, menos de la quinta parte del empleo y del pib se generan en sectores que serían afectados sólo de forma moderada (cepal, 2020a). Finalmente, la diferenciación entre el empleo asalariado privado y público es relevante ya que en todos los países que presentan información diferenciada, el empleo público destaca por su estabilidad, que contrasta con la fuerte contracción del empleo privado (cepal, 2020b). Sin embargo, es claro que el sector más seguro es el del trabajo asalariado público, mientras el sector privado, sea asalariado o independiente, es el más afectado. En general, después de los primeros meses se registró un crecimiento en la tasa de la informalidad. No se trata de una reactivación económica, sino de la necesidad de las personas de bajos recursos que perdieron su trabajo y buscaron formas alternativas de generar ingresos (cepal, 2020b). De hecho, fueron las propias clases más bajas y activas del sector informal las mayormente afectadas. Grupos de población afectados por el covid-19 En la región de América Latina, tal como se ha planteado líneas arriba, ciertos mercados laborales han sufrido y sufrirán un impacto mayor frente a la crisis económica provocada por el covid-19. Así también, algunos grupos poblacionales sufren ya
RkJQdWJsaXNoZXIy MTY4MjU3