Pasos Nueva Época 9

A.S.E. Integrador : una aproximación humanizante 9 Francisco Valverde D. de L.* EN BUS UEDA El Sistema Universitario Jesuita está por iniciar la revisión de planes de estudio de los programas de licenciatura siguiendo una tradición de evaluación permanente en sus procesos educativos que miran a su pertinencia a partir de la lectura de la realidad en la que se inserta. Para ello, cada universidad aportará un conjunto de experiencias educativas significativas de las que resaltarán aquellas que implican posibilidades de transformación social. La última revisión curricular de estos planes de estudio planteó dimensiones de la formación humana que se distinguen por su énfasis educativo, por tanto, es imprescindible entenderlas como una unidad dinámica que considera tres intencionalidades: formati- vas, interdependientes y “complementantes”; formar sujetos profesionalmente competentes (DFP 1 ), social- mente pertinentes (DFS 2 ) y humanamente responsables (DIFIU 3 ). Con esto, en la operación cotidiana de los planes y programas de estudio se observa: 1. Una tendencia histórica a la fragmentación de las dimensiones de la vida universitaria 2. Un amplio reconocimiento en propuestas curriculares y evaluaciones sobre la necesidad de transformar a la Universidad. ¿Cómo llevar a la práctica un modelo que parece dar posibilidades de humanización a nuestros alumnos en su proceso de formación? La orientación fundamental para atender a esta pregunta la encontramos en las características educativas de la Compañía de Jesús: formar personas conscientes, competentes, compasivas y comprometidas. La pregunta sigue vigente ante la manera de concretar esas características en la práctica docente. De ahí que, sistematizando experiencias educativas significativas, indagando en los elementos estructu- rantes del currículo y conociendo el perfil del profesor, encontramos que, para atender esta concreción educativa, formulamos algunas estrategias: a. Generar iniciativas que promuevan la integra- ción de las dimensiones y áreas a partir del planteamiento de desafíos sociohistóricos identi- ficados por la universidad b. Reconocer las problemáticas, los territorios y actores sociales que nos interpelan para espe- cializarnos en aquellos que son relevantes para incidir c. Promover ambientes de aprendizajes contex- tualizados, curriculares y co-curriculares, a lo largo de la experiencia universitaria. Para el momento en el que el estudiante entra en las áreas Mayor y Menor, en donde tienen lugar el Servicio Social y Área de Síntesis y Evaluación (ASE) II y III, es razonable pensar que tendrá un esbozo de proyecto académico, profesional y de vida gestado por sus experiencias formativas previas. Observamos que es posible ofrecer oportunidades para que el estudiante fortalezca su proyecto profesional y de vida a través de la asociación de diferentes espacios curriculares. Para favorecer en el alumno la profundización de su proyecto integralmente propusimos construir puentes entre las dimensiones de formación, a través de una secuencia articulada de experiencias de aprendizaje. 1 Congrega herramientas, prácticas, métodos y teorías para desarrollar con competencia una profesión. 2 Articula los aprendizajes construidos en el aula con el contexto social. 3 Impulsa un compromiso vital con la verdad y la justicia, a partir de planteamientos relacionados con cuestiones fundamentales del ser humano.