Pasos Nueva Época 13

12 *Coordinadora del Doctorado Interinstitucional en Educación Universidad Iberoamericana Puebla luzdelcarmen.montes@iberopuebla.mx Referencias CIAA, (s/f) “Competencias docentes”, Universidad Iberoamericana Puebla, Documento sin publicar Cid, A., Zavalza, M. A. y Doval, M. A. (2012). La docencia universitaria: un modelo para su análisis. Revista de Docencia Universitaria . 10, (1), 87-104. Recuperado de: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=4020170 De Miguel, M. (2003). Calidad de la enseñanza universitaria y desarrollo profesional del profesorado. Revista de Educación , núm. 331, pp. 13 – 34. Recuperado de: https://sede.educacion.gob.es/publiventa/detalle.action? cod=11294 Ezquerra, Á., De Juanas, A. y Martín del Pozo, R. (2015). Estudio sobre las actividades llevadas a cabo en la práctica docente universitaria para la formación inicial del profesorado de primaria y secundaria. Profesorado. Revista de Currículum y Formación de Profesorado, 9 (1), 330-345. Recuperado de: http://www.ugr.es/~recfpro/rev191COL3res.pdf Fernández March, A. (2006). Metodologías activas para la formación de competencias. Educatio Siglo XXI , 24, 35-56. Recuperado de http://revistas.um.es/educatio/article/view/152/135 serendipias “Un profesor competente en su ámbito profesional puede articular mejor las experiencias de aprendizaje para contribuir, desde su asignatura, al desarrollo de las competencias profesionalizantes a lo largo de la formación universitaria.” aprendizaje para contribuir, desde su asignatura, al desarrollo de las competencias profesionalizantes a lo largo de la formación uni- versitaria. Y no es que los conocimientos (¿cuáles?) dejen de ser rele- vantes, es que incorporados a las actividades de aprendizaje que desempeña el estudiante, reflejan que el docente cede el control del proceso disminuyendo su presencia para que el estudiante decida. Podría decirse que la práctica del docente acompaña la práctica del estudiante; quien tiene más experiencia, orienta y acompaña a quien tiene menos. Este formato se da por excelencia en casos en que los estudiantes son más autónomos en el aprendizaje, como en las prácticas profesionales, asesorías de tesis y prácticas de servicio social, que se desarrollan per se en escenarios profesionales, por lo que tomadas como referencia pueden ser modelos para el diseño de prácticas simuladas y situadas en talleres, laboratorios y otros contextos fuera de las aulas.