Pasos Nueva Época 11

La reflexión en la evaluación de la competencia docente de innovación 9 Marai Colmenares Fajardo* EN BUS UEDA Desde hace algunos años se ha hablado, con mayor intensidad, de la innovación y su importancia en el ámbito educativo. Pareciera que en el pasado los participantes de la formación no se hubieran preocupado por transformar y mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje. Seguramente lo hacían, pero como durante mucho tiempo existió un conceso sobre las formas de ejercer la enseñanza, solamente tenían que preocuparse por aprenderlas y esperar hasta el final a que dieran los resultados deseados. Ahora, las propuestas pedagógicas enfatizan la importancia de atender las necesidades particulares de cada estudiante, y hacerlo responsable de su aprendizaje; estamos experimentando momentos de cuestionamientos, dudas y exploración. Esta última se relaciona con la innovación en los procesos educativos, es decir, con efectuar cambios en las prácticas que mejoren el aprendizaje de los alumnos; además, como en todo proceso, la evaluación, pero sobre todo la autoevaluación, es fundamental. Por suerte, como docentes, esto nos obliga a acercarnos unos a otros para reflexionar, dialogar y compartir experiencias. La necesidad de innovación responde a la vocación que tienen algunas instituciones educativas y sus docentes de ofrecer al mundo mejores profesionales y ciudadanos, de cara a una realidad socioprofesional cambiante y caótica. Un mundo complejo, como el que vivimos, requiere de propuestas y soluciones igualmente complejas; por lo tanto, la capacidad de crear y transformar la realidad son competencias fundamentales para el futuro, lo cual obliga a las universidades y espacios educativos a convertirse en escenarios de innovación. Estos escenarios de transformación deben ser vistos como un proceso, no como un producto, es decir, como un ejercicio de reflexión y cambio continuo. Reflexión en tanto que requiere de un trabajo sistemático de autocrítica de la práctica y de transformación porque los resultados de estos trabajos deben convertirse en acción para la mejora del aprendizaje de los estudiantes. La competencia docente de innovación podría ser descrita como la capacidad para recrear y aplicar nuevas (y mejores) formas de ejercer la enseñanza, a partir de la comprensión del contexto educativo y de las necesidades cognitivas, emocionales y socioculturales de los estudiantes. De esta manera, la innovación se convierte en un asunto de toma de decisiones iterativas a lo largo del proceso formativo.