Pasos Nueva Época 10

2 criteri s Todo lo anterior, podrán apreciarlo en su texto titulado: “ Evaluar para transformar: la importancia de la evaluación del aprendizaje con enfoque formativo en la educación humanista”. Del mismo modo, en el apartado Serendipias , tenemos la participación de la Dra. Laura Bárcenas, académica del Doctorado Interinstitucional en Educación, quien comparte desde su experiencia como tutora en este posgrado, cómo la evaluación formativa es esencial para el desarrollo de los estudiantes como investigadores educativos. En esta colaboración, la autora informa cuál es el procedimiento llevado a cabo en el Seminario de Evaluación del Doctorado para evaluar de manera formativa a los estudiantes, destacando como puntos importantes: la formación de los Comités Tutoriales, los criterios de avance establecidos en el inicio del curso, la valoración al cumplimiento de los criterios mencionados, la retroalimentación de tutores y de los propios compañeros, y las recomendaciones hechas al proyecto; y prioriza a la retroalimentación como punto trascendental. Por lo anterior, su texto nos permite visualizar, de manera más amplia, la importancia que tiene esta competencia en los estudiantes, ya que les permite decidir qué se mejora y cómo serán sus proyectos, además de ofrecerles elementos formativos para que continúen en su proceso doctoral. Por último, en la sección Los números de la evaluación , el Mtro. Ariel Alcántara, académico jubilado de esta institución, nos presenta un análisis de la evaluación formativa desde la perspectiva del alumnado, la cual, a diferencia de los textos anteriores que exhiben la evaluación que los profesores hacen de los alumnos, nos da a conocer cómo los estudiantes valoran la competencia docente. Esto lo realiza desde un estudio con base en información de las evaluaciones docentes del periodo Primavera 2018, en donde se valoraron los resultados de las diferentes aptitudes de los profesores, poniendo especial atención en la de evaluación formativa, la que, según el presentador, estuvo calificada como “medianamente”, debido a una falta de formación pedagógica que consiste en que el profesor sabe y tiene conocimientos, pero no es apto para enseñar o transmitirlos. Esperamos que, con el contenido de este ejemplar, nuestros lectores encuentren aportaciones a sus prácticas docentes, pero, en especial, que puedan apreciar que hay diferentes formas de percibir la evaluación formativa, desde la perspectiva de estudiantes a profesores o de profesores a estudiantes, y así puedan aprender de ambas para su mejora e implementación dado el caso.