Pasos Nueva Época 1

El portafolios docente, una buena herramienta para la autoevaluación de la práctica pedagógica Laura Angélica Bárcenas Pozos* 6 Contextos E s sabido desde hace ya mucho, que los cambios educativos no se logran de manera satisfactoria porque los profesores no se involucran en éstos y que no hay formación docente que valga. Por muy buenos que sean los procesos, los profesores semantienen haciendo las mismas prácticas sin lograr un cambio de fondo que favorezca a los procesos de aprendi - zaje en el aula y, por lo tanto, a los alumnos. Fullan (1996) menciona que los cambios no se producen por sí solos, pues son obra de los profesores y los directores, en ellos recae la po - sibilidad de lograr que los cambios se lleven a cabo de manera efectiva y agrega que las reformas educativas fracasan porque no se considera a los docentes, sus intereses y necesidades para enfrentar dichas reformas y por - que se minimiza el problema de la enseñanza. Fullan y Hargreaves (1996) aseguran que uno de los problemas más importantes para que los cambios educativos no lleguen a buen puerto se presenta en el arranque, pues surgen problemas complejos y no es posible solucionarlos con los recursos dis - ponibles, además los plazos que se establecen para obtener resultados son irreales y frecuentemente se buscan so- luciones rápidas y superficiales. Por es- to no se le da un espacio significativo a la formación docente, ni se buscamodi - ficar las formas de instrucción, no se crean nueva políticas que favorezcan el cambio y muchas estrategias más que motivar a los docentes para qu e participen, los disua- den. Así que no se establecen las condi - ciones necesarias para movilizar a los profesores hacia el cambio. Además, es conveniente conside- rar a la escuela como una organización que se construye socialmente por todos los que la conforman, mediante las interacciones que establecen entre ellos y dentro de su contexto. Estas interacciones determinan lo que sucede en las instituciones edu - cativas y de ellas depende que el cambio se realice. Por esto, Fullan (2001:9) afirma que la transformación empieza por las personas y que es aquí donde se inicia un verdadero cambio en las instituciones educativas: “el sistema es intrínsecamen - te no lineal y endémicamente fragmen - tado e incoherente. Asimismo, se señala que esta forma de ser es propia de la naturaleza de las sociedades dinámi - camente complejas. La única defensa posible es desarrollar una capacidad de aprendizaje tanto interna como externa a pesar del propio sistema, con el fin de crear patrones coherentes en el individuo y en el grupo. Comenzando por el apren - dizaje interno”. Ya que los cambios toman tiempo y no se logran por designio, se considera que una manera pertinente de llevar a cabo la formación de profesores es que sea a largo plazo, que esté centrada en el