Encíclica Laudato Si'

94 sonas y con Dios. Sería un individualismo romántico disfrazado de belleza ecológica y un asfixiante encierro en la inmanencia. 120. Dado que todo está relacionado, tampoco es compatible la defensa de la naturaleza con la justificación del aborto. No parece factible un camino educativo para acoger a los seres débiles que nos rodean, que a veces son molestos o inoportunos, si no se protege a un embrión humano aunque su llegada sea causa de molestias y dificultades: « Si se pierde la sensibilidad personal y social para acoger una nueva vida, también se marchitan otras formas de acogida provechosas para la vida social ».97 121. Está pendiente el desarrollo de una nueva síntesis que supere falsas dialécticas de los últimos siglos. El mismo cristianismo, manteniéndose fiel a su identidad y al tesoro de verdad que recibió de Jesucristo, siempre se repiensa y se reexpresa en el diálogo con las nuevas situaciones históricas, dejando brotar así su eterna novedad.98 El relativismo práctico 122. Un antropocentrismo desviado da lugar a un estilo de vida desviado. En la Exhortación 97 Id., Carta enc. Caritas in veritate (29 junio 2009), 28: AAS 101 (2009), 663. 98 Cf. Vicente de Lerins, Commonitorium primum, cap. 23: PL 50, 668 : «Ut annis scilicet consolidetur, dilatetur tempore, sublimetur aetate ».

RkJQdWJsaXNoZXIy MTY4MjU3