La 4T bajo la lupa

— 78 — 1. Refuerzos normativos y transformaciones institucionales. El tema de la inseguridad que percibenyviven lasmujeres en territoriomexicanoha sido asumidopor el gobiernode la 4T como uno con raíces estructurales que requiere, por ende, modificaciones en las formas de socialización y en las posibilidades entregadas a ellas para desempeñar proyectos de vida en condiciones de igualdad con los varones. Así las cosas, las normas expedidas, tanto como las acciones institucionales proyectadas se juegan en la transformación estructural que tendrá réditos en el mediano y largo plazo. En la creaciónde unmarco normativo que puede servir paramodificar comportamientosmachistas vale la pena resaltar: 1) el apoyo entregado por el gobierno a la ley contra el acoso digital mediante la difusión de imágenes íntimas (Ley Olimpia); 2) la aprobación enmayodel 2019 de la Leyde ParidaddeGénero (establece la paridadpara lasmujeres en los tres poderes del Estado, en los tres órdenes de gobierno, en las candidaturas de los partidos políticos a cargos de elección popular, en los organismos autónomos, así como en la elección de representantes ante los ayuntamientos en los municipios con población indígena); y 3) la inclusión en la Ley deAmnistía de lasmujeres que fueron procesadas federalmente hasta abril del 2020 por el delito de aborto. A tales innovaciones, que pueden ayudar a contener acciones que atenten contra la libertad e igualdad de las mujeres hasta que se conviertan en parámetro de relacionamiento normalizado entre los géneros, se suma acciones que en más corto plazo pueden ayudar a reducir la brecha existente entre hombres ymujeres. Entre estas cabe resaltar: a) el aspecto simbólico de inclusión de mujeres en puestos de decisión clave del gobierno; b) la creación de alianzas estratégicas con organizaciones internacionales para focalizar recursos que ayuden a atender a las acciones urgentes que requiere el fenómeno del feminicidio en el país (la Iniciativa Spothlight establecida junto con laONUy laUnión Europea es buen ejemplo de ello); c) las acciones diseñadas desde diferentes carteras para focalizar a las mujeres entre los grupos de atención prioritaria buscando con ello garantizar su capacitación laboral y autonomía económica;56 d) el diseño por parte de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres de una metodología para la elaboración del Informe Anual de Cumplimiento de la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres (2020: 22), para de esa forma homologar los medios de rendición de cuentas y evaluación de resultados de las acciones implementadas por las entidades federativas al respecto; y e) las robustas acciones interinstitucionales que buscan aplicación en el corto plazo e indicadoresmuy específicos creados con perspectiva de género que se establecieron en el marco del ProgramaNacional para la Igualdad entre Mujeres y Hombres (Proigualdad) 2020-2024.57 56 Este asunto sería una apuesta dimensionada desde los primeros meses de gobierno. Según palabras de Nadine Gasman Zylbermann, presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres: “Los programas sociales de este gobierno tienen más mujeres como beneficiarias directas: Jóvenes Construyendo el Futuro llega a 342 mil mujeres, lo que significa 58% del total, Sembrando Vida ha beneficiado a 43 mil mujeres en el campo, el 90% del programa de Apoyo al Bienestar de Niños y Niñas de Madres, Padres y Tutores Trabajadores beneficia a mujeres; y el programa de Adultos Mayores mejora la vida de tres millones de mujeres” (AMLO, 29 de mayo del 2019). 57 En este plan tanto el Objetivo prioritario 4 (Combatir los tipos y modalidades de violencia contra las mujeres, niñas y adolescentes, preservando su dignidad e integridad), como el 6 (Construir entornos seguros y en paz para las mujeres, niñas y adolescentes), presentan 11 estrategias y 91 acciones puntuales a realizarse

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