Contratiempo

IBERO Puebla | 10 EN LA IBERO E l pasado 9 de marzo se lle- vó a cabo el paro nacional #UnDíaSinNosotras, el cual significó la ausencia durante 24 horas de mujeres en escuelas, es- pacios públicos, oficinas de go- bierno, empresas. La IBERO Puebla se sumó a este paro, y estudiantes que co- laboran en Contratiempo y el Ob- servatorio de Transparencia Con los Ojos Abiertos nos comparten sus impresiones, sentimientos y re- flexiones sobre este día y cómo se vivió la universidad sin nosotras. Héctor Eduardo García Hernández, estudiante de Relaciones Internacionales Mi día comenzó en el transporte de la IBERO, el cual es utilizado principalmente por mujeres, pero este día sólo estábamos el conductor y yo. Desde ese primer momento pude presenciar la ausencia de mis compañeras y no pude evitar sentirme raro y con miedo, toda mi vida me he senti- do incómodo e inseguro cuando estoy rodeado de hombres heterosexuales, esa incomodidad persistió hasta el último momento del día. Después utilicé mis horas del servicio social para asistir a uno de los talleres organizados por la universidad, si bien reconozco la necesidad de realizar estos espacios y que al- gunos comentarios fueran acertados, creo que muchos de los presentes realmente no estaban ahí por gusto, ni mucho menos que la reflexión fuera más allá del protagonismo y demás vicios de lo masculino. Considero que entre los presentes existía un sentimiento general de preocupación, de incertidumbre sobre qué hacer y un reconocimiento de culpabilidad y necesidad de cam- bio. Lo que también es cierto es que a pesar de todo esto #UNDÍASINNOSOTRAS Equipo IBERO Prensa Fotos: Ana Paula López Aldana quienes más necesitaban escuchar estas palabras no se encontraban presentes. Más tarde, me encon- traría escuchando la conversación de un grupo de hombres que se burlaban de las actividades del día y los esfuerzos de las mujeres, lo cual únicamente me llevó a sentir- me peor de lo que ya estaba. Los lunes por la tarde gene- ralmente no hay mucha gente, al menos desde mi percepción, esta vez la sensación de vacío era más grande, todo se encontraba en un silencio poco reconfortante. Me di- rigí a clase de siete donde sólo es- tábamos el profesor y yo, en un salón donde normalmente hay más 20 personas, de las cuales debería haber otros cin- co hombres, así que después de intercambiar algunas per- cepciones del día me dejó ir únicamente para encontrarme con la vez que menos gente he visto en esta universidad desde hace cinco años que entré. Finalmente mi día terminó como inició, el conductor del transporte de la IBERO, un desconocido sentado en la parte final, yo y el mismo sentimiento con el que llegué a la uni- versidad, pero esta vez con la reflexión de que lo sucedido este día va a estar presente en mi vida por mucho tiempo. Maximiliano Pérez Gallardo Díaz, estudiante de Relaciones Internacionales El 9 de marzo de 2020 va a quedar marcado como una fecha histórica en México, fue el día en el que las mujeres detuvieron el país y causaron un impacto nunca visto en el sector masculino de la sociedad. Mi día empezó a las 11 de la mañana, normalmente en- traría a mi clase de Derecho, pero este no era un día normal, mi profesora se unió al paro y faltó, por lo cual me di a la