Contratiempo

20 21 Opinión Opinión Reflexiones de una tormenta Por: Mara González González Licenciatura en Derecho E s triste que los humanos no re- cuerdan que siempre estoy pre- sente hasta que lo hago evidente. Me han dadomuchos nombres a lo largo del tiempo, he visto y escuchado todo, los he ayudado a impulsar sus embarca- ciones, sus cometas, aviones, etc. pero eso no me lo agradecen, sólo unos pocos me recuerdan y cuando la mayoría pone su atención en mí es cuando estoy más molesto, cuando causo desastres, cuan- do no puedo controlar mi naturaleza y debo liberar mi exceso de energía. Mi nombre es aire. Corto, sencillo y cam- biante como la marea. Cuando estoy molesto denominan mi humor con las palabras tormenta o huracán, y para diferenciar cada uno de mis desplantes me ponen otros nombres, los dos más recientes fueron Ingrid y Manuel . Aún después de tantos años con- viviendo con humanos me siguen pa- reciendo muy curiosas sus investiga- ciones científicas, llegan a resultados impresionantes pero entonces, cuando logran predecir eventos futuros e in- tentan alertar a los demás de su pro- pia destrucción son muy pocos los que realmente se interesan y ocupan de hacer algo al respecto, ya que si los he- chos no son dichos por personajes de reflectores todos los descubrimientos realizados son catalogados de menti- ras. Esto precisamente ocurrió cuando se hablaba de la posible relación entre el aumento de la temperatura del mar y la intensidad de mi humor. ¡Dijeron que no era posible! ¿Cómo no va a ser posible si el motor para que yo pueda girar es la temperatura del mar? Por fortuna, aún hay científicos como los del Departamento de Geografía de la Universidad Estatal de Florida, que se toman el tiempo para demostrar que el aumento en la temperatura del mar provoca que yo, en mi humordehura- cán, gire más rápido, dando vueltas so- bre un eje, a una velocidad de entre 150 y 240 kilómetros por hora. Si las personas se preocuparan por su planeta les importaría saber más de los estudios y sabrían que el aumento en la temperatura del mar es una con- secuencia del cambio climático, que por cierto, aumentó de 0.74, en 2007 a 0.85 grados en 2012.Los humanos, como siempre, menosprecian la gravedad del asunto justo como cuando presentaron las conclusiones del quinto Reporte de Evaluación del Panel Interguberna- mental sobre Cambio Climático, don- de advertían que México es uno de los países más afectados por mis cambios de humor debido a que es intercepta- do por el Trópico de Cáncer y aunado a esto, cuenta con más de 11 mil 200 kilómetros de litorales. Litorales como los de Guerrero, Michoacán, Colima, Sinaloa y Oaxaca. Hace unas semanas llegué bastan- te enojado a estos lugares y pude ver al entrar, los letreros con su población, en los estados de Guerrero y Michoacán la diferencia de habitantes es mínima pero en el primero había muchos más turistas como ya es costumbre, quizás esa es la razón por la cual, después de que pasé, la gente hablaba más de los daños en Guerrero que en Michoacán, pero bueno, hay que ser realistas, el en- foque mediático fue centrado en Aca- pulco sin importar las tantas denuncias de que no se están atendiendo a todos los municipios del Estado por igual. Al parecer, los destinos menos turísticos pueden esperar. Si bien causé muchos daños en Guerrero, lo cierto es que en Michoacán también descargué bastan- te mi ira, pues según escuché, causé da- ños en 24 municipios y 20 de ellos de gravedad, calculan que un promedio de 8 a 10 mil personas resultaron afecta- das en 3 mil viviendas. Pero eso pare- ce no ser motivo suficiente como para hacer una colecta por Michoacán en el zócalo capitalino, o para destinar más recursos del Fonden para el rescate de comunidades que siguen incomunica- das. De hecho, ni el presidente ha po- dido ir a Michoacán, él era esperado en Zitácuaro pero se informó que la gira fue cancelada debido a las malas con- diciones climatológicas que impidieron volar en helicóptero. De verdad que los humanos son extraños, ¿Cómo pueden estar tan tranquilos? Tienen su conciencia tan impasible aun cuando existen miles de personas cubiertas con el ropaje miserable de la ignorancia, la carencia y el fanatismo, un fanatismo tal, que prefieren que deambulen con pasos siniestros y grotescos el hambre y la necesidad, antes que recibir ayuda de una revista “indecente” como Playboy , la cual mandó ayuda para los estados afectados por mi paso, pero la perso- na a cargo decidió devolver los víveres pues no era la ayuda esperada. He seguido observando como las personas intentan reparar los daños ocasionados por mi enojo y he notado que al parecer se esfuerzan en ayudar no a los más afectados sino a los que los hacen ver mejor con el turismo, no entiendo porque hacen eso ¿Acaso los habitantes de Acapulco son distintos de los de Zitácuaro? Yo los veo igual, son personas y tienen las mismas necesi- dades, su diferencia radica quizá en lo que podrían llegar a aportar económi- camente a su país. Pero ¿quién soy yo para criticar?, después de todo sólo soy aire y gracias a la indiferencia de las personas ante los cambios negativos que están ocasionan- do a su planeta puedo seguir expresán- dome libremente, ya sea volando un co- meta o destruyendo todo a mi paso. Sólo espero que algún día los humanos apren- dan a cuidarse unos a otros, así como a de su planeta, y de esa manera mis eno- jos al igual que los daños serán menores. De-Tourist-ando: Los Almuerzos Por: Luis Javier Castañeda Estudiante de Mercadotecnia A quí estoy nuevamente saludán- dolos en esta sección, esperan- do les sea de interés, además de contarles sobre un restaurante que considero de los mejores para ir a desa- yunar o almorzar: Los Almuerzos . Hace muchos años en la colonia El Mirador, en una cochera sobre la 16 sur, se inició la venta de desayunos mexicanos donde la comida de antaño era, y sigue siendo, el principal atracti- vo y la esencia del lugar. Con el paso del tiempo el lugar fue creciendo, así como la clientela y el menú, hasta abrir una sucursal en La Noria (Circuito Interior y 17 Sur) con un local más amplio y para atender a los comensales de esa zona; tiempo después, debido al incremento de la gente, abrieron una sucursal todavía más grande y con área de juegos para los pequeños, en el Barrio de Santiago, sobre la 19 poniente y 23 sur antes de llegar a la Av. Juárez. Es un restauran- te familiar muy acogedor, con música mexicana de fondo y atendido por me- seros y meseras universitarios, y mis respetos a las cocineras. Algo que me encanta de este lugar son los churros que te dan al principio: hechos en casa y recién horneados (los recomiendo ampliamente) y en el menú encontramos huevos al gusto, platillos mexicanos como chilaquiles, enfrijola- das, chicharrón en salsa, moronga en- tre otras cosas, y por supuesto: tortillas hechas a mano y de comal. Sin duda un excelente lugar para desayunar o almorzar. Si tienes algún lugar que quieras compartirnos (no necesariamente de alimentos y bebidas) que consideres importante que los estudiantes conoz- camos, háznoslo llegar para nuestro si- guiente número al mail iberoprensa@ iberopuebla.mx o a la página de Face- book: Contratiempo . Y así de pronto, se rompió mi alma Por: Sing the Stone 2 de Octubre de 2013 Cholula, Puebla 8:30 pm Y así de pronto, se rompió mi alma. Y me permití llorar. Y me dejé sufrir. No pude concebir la naturaleza del hombre, tan maravillosa en su exis- tencia, como arma de destrucción y de sufrimiento. Hace unos minutos, terminé de gra- barme hablando de trivialidades de mi vida cotidiana como un tipo de terapia en la que cuento lo relevante que me ha pasado en el día y cómo me he sentido al respecto. Terminé contenta y cantando, por lo que me metí a las redes sociales para ver qué pasaba en el mundo. Cuál sería mi desagradable sorpre- sa, encontrarme con un video viral que demandaba auxilio para detener cierta actitud. El morbo cedió en mí y decidí mirar el video. Tres chicas, alrededor de mi edad, habían acorralado a un ca- chorro y lo pateaban por turnos hacien- do que el animal llorara, le adelanté al video para ver si lo dejaban o si era de juego y luego lo apapachaban; mi ho- rror fue el darme cuenta que brincaban encima de él y lo pisaban como si fuera de goma. Al cabo de unos minutos (y de adelantarle al video), el cachorro yacía muerto en el suelo mientras las chicas seguían indiferentemente golpeándolo. Terminé por quitar el video y entré en un estado de shock que no me dejó sentir ni percatarme de lo que había presenciado. Después de unos segundos comencé a llorar desconsoladamente y Pensaba que el sufrimiento era una opción personal y que nadie podía ser un causante externo, pero descubrí que más que eso, también se puede provocar. al mismo tiempo en mi mente se repro- ducían esas grotescas imágenes una y otra vez. Inmediatamente, y después de haberme calmado, tuve la urgencia de plasmarlo. De compartir mi sufrimien- to por el cachorro. Tengo la necesidad de expresar mi decepción y mis pocas ganas de volver a cantar, o reírle al mundo en este momento. Se que pro- bablemente en unos días, o en unas ho- ras podré sobrellevar mi sentimiento de repulsión, pero ahora solo puedo decir que si hay algún propósito por el cuál me encuentro aquí en este momento, es el de decir mi descontento con el modo en el que nos hemos vuelto insensibles ante este tipo de situaciones, de cómo hemos aceptado y pasado de largo a to- dos aquellos que nos han necesitado, o que les hemos dado la espalda. Se me hace inconcebible que ten- gamos la idea de ser más valiosos que cualquier otro ser vivo en el planeta, y que el tener que cometer actos atro- ces como matar, o el simple hecho de agredir verbalmente a otra persona, de- muestren poder. Yo creo que muestra debilidad y cobardía. Foto por: www.facebook.com/jmdesart

RkJQdWJsaXNoZXIy MTY4MjU3