INICIATIVAS PARA LA SUSTENTABILIDAD Y EL CUIDADO DE LA CASA COMÚN EN LA IBERO PUEBLA / 59 entre las ciudades del mundo con mayor volumen de residuos, están: Incheón, en Corea del Sur, con un volumen de 18 a 20 mil toneladas al día, seguido por la Ciudad de México con 12 mil toneladas y Las Vegas, Nevada, con 10,500 toneladas al día. En nuestro país, otro problema es el porcentaje de sitios controlados, que son de 13% (INEGI). El resto, 87%, son tiraderos a cielo abierto de acuerdo con Semarnat (2019). La Ciudad de México (antes Distrito Federal) ha demostrado un caso exitoso de colaboración entre organizaciones ambientales y gobierno, con el diseño y operación del reglamento de residuos del Distrito Federal, implementado en el año 2008. Su contenido clasifica detalladamente el manejo, disposición, reciclaje y destino final de los residuos. Contempla la separación por colores y clasificación en orgánicos (verde) e inorgánicos aprovechables (gris) y no aprovechables (naranja). Desde el año 2018 en esta ciudad se aplica su obligatoriedad. No obstante, esta regulación no se ha adoptado de manera regular ni uniforme en los demás estados, lo cual constituye una área de oportunidad, pues las capacidades institucionales se encuentran rebasadas para poder dar seguimiento y atención a este problema. Otro de los problemas que se enfrenta a escala municipal: al estar concesionados los rellenos sanitarios, tanto en el traslado como en la disposición (Ibarrarán, 2018), a mayor cantidad el manejo es más rentable. En 2003 se crea la Ley General de Prevención y Generación de Residuos. No obstante que la legislación para la prevención y gestión integral existe, la normativa para la separación, la clasificación de los residuos, la responsabilidad extendida a los productores y las capacidades institucionales de los gobiernos se encentran rebasados (Canales Cueto, 2018). En este sentido, resulta conveniente recuperar y poner en marcha el objetivo 17 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) (Cortina, 2020), con relación a la generación de residuos y las condiciones laborales de los recicladores, y su participación en la cadena de valor. El objetivo 17 (“Alianzas para lograr los objetivos”) resume la labor conjunta que debe realizarse entre los diversos actores para alcanzar la salud ambiental y el uso razonable de los bienes comunes. Cabe recordar que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), organismo de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), es la responsable de vigilar el cumplimiento de la normativa ambiental en nuestro país. En el año de 2016, durante una campaña de “Industria Limpia y Calidad Ambiental”, realizó un exhorto para que las instituciones de educación superior se certificaran voluntariamente como industria limpia, en apego al cumplimiento de la normatividad oficial mexicana NOM 083, NOM 052 de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LEGEEPEGIR). Entre
RkJQdWJsaXNoZXIy MTY4MjU3