Iniciativas para la sustentabilidad y el cuidado de la casa común en la IBERO Puebla

44 / INICIATIVAS PARA LA SUSTENTABILIDAD Y EL CUIDADO DE LA CASA COMÚN EN LA IBERO PUEBLA parte del gobierno que nunca funcionaron como las familias lo esperaban, y otros proyectos individuales de vecinos que por iniciativa propia captaban agua de lluvia para diversos usos. Tal fue el caso de doña Tere,13 quien incluso bebía del agua que captaba de su techo de lámina. Fue con ella con quien iniciamos el proyecto. La plática con los vecinos también nos dejó ver la complejidad del acceso al agua y la situación tan agravante a la que se enfrentan día con día. Blanca, una señora de más de 80 años, nos comentó durante una plática que un año no cayó una sola gota de agua de su llave durante seis meses, sin embargo, tenían que seguir pagando la cuota para no generar deuda; ella había escuchado por voz de otros vecinos que decidieron dejar de pagar que tenían deudas por arriba de 10 mil pesos. De forma paralela se investigaron experiencias de captación de agua de lluvia tales como la de Isla Urbana, Granja La Tierra, Casita de Barro, las cuales nos brindaron diferentes elementos para adaptar dicha ecotecnología a las necesidades, estilos de vida y arquitectura de la zona lo mejor posible. Entonces se diseñó un modelo base de sistema de captación, con materiales accesibles y económicos (PVC en su mayoría) para los habitantes, que fuera adaptable para cualquier tipo de arquitectura en la zona y que además fuera de fácil operación y mantenimiento (ver el diseño en la figura 5). 3. Contacto con primeros vecinos: gracias a las redes que Casa IBERO ha logrado tejer con los vecinos, se logró el contacto con las primeras personas con quienes se platicó sobre el tema y consecuentemente se trabajó sobre la línea del proyecto de captación de lluvia. De ahí, como un efecto dominó, los interesados comenzaron a llegar a Casa IBERO para saber más sobre el proyecto. Vale la pena mencionar que algunos de esos interesados, acostumbrados a las relaciones asistencialistas, iban en busca de donaciones, sobre todo de tanques de almacenamiento. 4. Entrevista semiestructurada: una vez que se establecía un contacto, el procedimiento se hizo de forma particular con cada familia. En sus casas realizábamos una entrevista semiestructurada para reconocer la situación económica y social de las familias y que esto nos permitiera evaluar el impacto de los sistemas de captación. En general, la entrevista nos permitía recopilar datos cuantitativos y cualitativos de los miembros de la familia, sus ingresos y egresos económicos, y su situación particular de acceso al agua. 5. Evaluación técnica de la construcción: conforme íbamos contactando con los vecinos y se hacía la entrevista semiestructurada, establecíamos citas con ellos para hacer la evaluación técnica de su casa, durante la cual se ubicaba, diseñaba y 13 Los nombres de los vecinos han sido cambiados para cuidar la privacidad de las personas.

RkJQdWJsaXNoZXIy MTY4MjU3