112 DERECHOS HUMANOS ANUARIO 2022 Ejército en especial, reprimió de forma directa la libre manifestación de las ideas, el disenso y la oposición al poder en turno. Con resistencias y contrariedades, ello ha llevado en el tiempo reciente a la instalación y puesta en marcha de mecanismos extraordinarios de acceso a la verdad. Sin embargo, estos mismos esfuerzos topan con pared en un entorno político en el que las Fuerzas Armadas gozan de poder de veto, producto del capital político que han venido acumulando en los últimos años. Este artículo ha dejado en claro que la criminalización de la protesta social, y con ello su desaliento, no ha necesitado de nuevas reformas legales. Es un hecho que el sexenio en curso ha incrementado con una lógica de populismo punitivo el catálogo de delitos asociados al esquema de prisión preventiva oficiosa que, de suyo, transgrede derechos fundamentales como el debido proceso y la presunción de inocencia. Pero no ha sido la tendencia legislativa tan manifiesta en el sexenio 2012-2018 la que ha acompañado la estigmatización del derecho a la protesta. Atendiendo lo que ha acontecido en las protestas feministas en la Ciudad de México, han sido fundamentalmente el uso excesivo de la fuerza pública y la criminalización a manifestantes, periodistas y defensores de derechos humanos por parte de los cuerpos policiales, por un lado, junto con la descalificación de las movilizaciones hecha por autoridades públicas, por otro lado, los patrones esgrimidos para atacar la organización y la expresión colectiva. En este sentido, inquieta sobremanera que un tercio de las instituciones de seguridad de las entidades federativas del país estén en manos de perfiles castrenses cuyas lógicas de actuación son de este talante. Como se ha argumentado, así avanza también la militarización, haya o no haya soldados y marinos en las calles. En tanto catalizador de un debate abierto y plural, el derecho a la protesta guarda estrecha relación con el fortalecimiento de la vida democrática. En condiciones como las presentes en México, en las que persisten graves problemas estructurales y estos coexisten con expectativas políticas frustradas, la militarización es un factor potencialmente desestabilizador para la vigencia de los derechos humanos en los que se sustenta un Estado democrático de derecho. Referencias bibliográficas Amnistía Internacional (2021). México: la (ira)era de las mujeres. Estigma y violencia contra mujeres que protestan. London: Amnesty International. Aquino, E., Estrada, A. & Ordaz, P. (2021). <<#8M: Protesta feminista en CDMX toma el Zócalo; reportan 81 mujeres lesionadas>>. Animal Político, 8 de marzo. Acceso el 22 de junio de 2022. https://www.animalpolitico. com/2021/03/8m-protesta-cdmx-movilizacion-policiaca/ Aquino, E. & Sarabia, D. (2022). <<La marea del #8M toma las calles y vence las advertencias de que la CDMX tendría una marcha “muy violenta”>>. Animal Político, 9 de marzo. Acceso el 22 de junio de 2022. https://www. animalpolitico.com/2022/03/marcha-de-mujeres-8m-2022-mujeres-cdmx/ Arana, Daira & Anaya, L. (2020). <<De la militarización al militarismo>>. Nexos, 16 de noviembre. Acceso el 27 de junio de 2022. https://seguridad. nexos.com.mx/de-la-militarizacion-al-militarismo/
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