170 DERECHOS HUMANOS ANUARIO 2020 teniendo en cuenta sus necesidades y condiciones específicas, de tal forma que sea accesible y asequible para todas las personas. Esta Declaración, en su artículo sexto dice: 1. La educación y la formación en materia de derechos humanos deben aprovechar y utilizar las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones, así como los medios de comunicación, para promover todos los derechos humanos y las libertades fundamentales. 2. Deben alentarse las artes como medio de formación y sensibilización en la esfera de los derechos humanos (Declaración de las Naciones Unidas sobre educación y formación en materia de derechos humanos, 2011). El arte es otro recurso adecuado ya que permite complementar la metodología didáctica y acercarse a grupos en situación vulnerable debido a que, en ocasiones, éstos manifiestan rechazo por actividades educativas de carácter formal o, simplemente, para abarcar espacios no formales de reflexión y sensibilización. Así lo recomienda Villavicencio (2015) al explicar que las experiencias artísticas generan la sensibilidad idónea para tener un contacto más profundo con el tema, sin importar que las personas sean creadoras o únicamente espectadoras. Por ello, quienes educan en derechos humanos pueden recurrir a expresiones artísticas como muestras de cine, murales, fotoperiodismo, clubes de lectura, cuentacuentos, obras de teatro, danza y música, entre otras. Además, en el ámbito no formal, hace falta la generación de espacios de confluencia y articulación entre la sociedad civil y el sector gubernamental, así como de la participación del sector empresarial y de los medios masivos de comunicación. Los temas pertinentes en la actualidad En la cuarta etapa del Programa Mundial para la Educación en Derechos Humanos (2004), en la que nos encontramos actualmente, se decidió enfocar el trabajo en las y los jóvenes, poniendo énfasis en los temas de igualdad, derechos humanos, inclusión y respeto de la diversidad. Esto en consonancia con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, adoptada el 25 de septiembre de 2015 por la Asamblea General de la ONU, que en su Objetivo 4 platea el desafío de garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad para todas las personas durante toda la vida y donde se manifiesta la aspiración de que, para 2030, se asegure que todo el alumnado adquiera los conocimientos necesarios para promover el desarrollo sostenible: […] mediante la educación para los estilos de vida sostenibles, los derechos humanos, la igualdad de género, la promoción de una cultura de paz y no violencia, la ciudadanía mundial y la valoración de la diversidad cultural y la contribución de la cultura al desarrollo sostenible (Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, 2015, meta 4.7).
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