56 DERECHOS HUMANOS ANUARIO 2019 que crea al Instituto Aguascalentense de las Mujeres fue aprobada y publicada en el Periódico Oficial del Estado el 19 de noviembre de 2001 (POEA, 2001). Conclusiones Para llegar a la institucionalización del enfoque de género ha sido necesaria la incorporación a las agendas públicas de temas relativos a las desigualdades de género a lo largo de las últimas cuatro décadas. La expansión de los movimientos feministas más allá de sus fronteras nacionales hizo posible, con el paso de las décadas, la emergencia de un nuevo campo de acción política en torno a la discriminación de género. La construcción de redes entre los movimientos feministas, no sólo en el centro y sur de nuestro continente sino intercontinentales, ha posibilitado el intercambio, la conformación de agendas regionales y la generación de estrategias para incidir en instancias de carácter internacional. Una de esas instancias que ha sido, en alguna medida, permeable a la presión de los movimientos feministas, es la Organización de las Naciones Unidas. La transnacionalización del movimiento feminista y la realización de la IV Conferencia Internacional de las Mujeres y las precedentes, generaron mejores condiciones de exigibilidad para las redes feministas en los espacios locales. Esto permitió que, aun en los estados donde el movimiento feminista tenía poca fuerza, se dieran condiciones distintas de interlocución con las instituciones de gobierno. La incidencia más fuerte del feminismo en la conformación de la agenda no tuvo lugar en el ámbito estatal, es decir, no desde la acción feminista local, sino en la escala internacional a través de la Conferencia de Beijing. Las presiones de los grupos feministas sobre sus delegaciones y el trabajo de las organizaciones durante los dos años previos a la conferencia lograron integrar algunas de las preocupaciones del movimiento a la Plataforma de Acción. Luego, esta plataforma sería recuperada por los grupos nacionales y locales como instrumento de legitimación para demandar a sus gobiernos mecanismos de género. Es decir, la construcción de la agenda a una escala internacional favoreció que se demandara su cumplimiento en el espacio nacional y estatal. Si bien, esta es una secuencia que han seguido las demandas de otros movimientos sociales, la influencia de lo global en lo local no es unidireccional. En un mundo cada vez más globalizado la incidencia es mutua: de lo global a lo local y de lo local a lo global. La forma en que ocurra esta influencia dependerá del posicionamiento y la fuerza que tengan las redes locales vinculadas a las redes globales. Desde una mirada de conjunto del proceso descrito se puede destacar que un evento importante a escala internacional, como fue la Conferencia de Beijing, abrió una coyuntura decisiva a escala nacional en México. Desde la fase preparatoria para asistir a esta Conferencia, una coalición de grupos feministas se movilizó en nuestro país para influir en la toma de posición que llevaría el Gobierno
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