Derechos Humanos / Anuario Edición 2019

138 DERECHOS HUMANOS ANUARIO 2019 ta-leninista, participa en diversos foros con tendencias panafricanas, y empieza a formular su teoría, la que posteriormente publica bajo el título de Neocolonialismo, última etapa del imperialismo (1965), texto que hasta hoy se ha convertido en el clásico central de los estudios neocoloniales, especialmente para los africanistas y científicos sociales. En sus tesis, Nkrumah devela la existencia de ciertas prácticas, posteriores a la Segunda Guerra Mundial, cuya aplicación en África impide una libertad real y, por lo tanto, induce a una débil formación de los Estados Nación. Como ya se ha mencionado, la crítica de Nkrumah, desde una posición de izquierda, coincidía también con la postura de los denominados “países no alineados”, y manifestaba que “la esencia del neocolonialismo es que el Estado que le está sujeto, en teoría independiente, tiene todas las galas externas de la soberanía internacional. En realidad, su sistema económico y, con ello su política, están dirigidos desde fuera” (Nkrumah, 1965: 5). Sobre el mismo camino, también asienta que no necesariamente es el mismo país del que se fue colonia el que incide en la política del joven Estado, ejemplificando su idea con el Vietnam de los años cincuenta y sesenta, cuyo regenteo estaba operado por EUA o, incluso, por empresas privadas internacionales o multinacionales, como algunos cárteles de carbón o diamantes en Sierra Leona o República Democrática del Congo. Un elemento de gran importancia estudiado por Nkrumah, y que ha sido hasta hoy un tema de estudio de los tratadistas de asuntos africanos es lo que en la actualidad se conoce como “la maldición de los recursos naturales”, puesto que la gran cantidad y la buena calidad de materias primas como el carbón, petróleo, maderas preciosas, agua, diamantes, oro, cobre y coltán, por mencionar algunas, ha convertido al continente en un punto geopolítico de gran importancia para los países más desarrollados. A partir de ejemplos, cifras macroeconómicas, indicadores políticos, y demás instrumentos de medición, Nkrumah sostiene las distintas ideas que va mencionando a lo largo de su obra y que, sin duda, inspiraron a más investigaciones. De igual forma, aunque treinta años después, Thomas Sankara sorprendió al mundo con sus críticas al neocolonialismo por la intromisión de Francia en asuntos africanos. Durante sus intervenciones en las cumbres francófonas y franco-africanas de la primera mitad de los años ochenta, bajo un discurso también marxista leninista, pero más moderado en lo económico, que el de Nkrumah, reivindicaba, a través de la lucha revolucionaria y la denuncia en foros internacionales, la idea del panafricanismo y el reconocimiento de los derechos de los pueblos, así como de los derechos humanos como herramientas para combatir al neocolonialismo europeo. Tanto Nkrumah como Sankara fueron depuestos por sendos golpes de Estado auspiciados de hecho por agentes extranjeros. En el caso de Nkrumah, luego de su salida de Ghana, se refugió en países europeos del bloque socialista y falleció en Rumanía en 1972 por causa de un cáncer avanzado. Sankara por su parte, fue asesinado y enterrado sin honores, en una modesta tumba a las afueras de Burkina Faso. En ese sentido, es de destacar el uso de la historicidad y la sistémica en los autores señalados, particularmente la aplicación del neomarxismo para defender la idea clásica de soberanía y autodeterminación de los pueblos, así como la reivindicación de la sociedad por medio de la lucha y las prácticas colectivas. Así pues, como hasta aquí ha quedado en evidencia, ya sea a través de las reivindicaciones sociales, o con la creación de instituciones, las revoluciones africanas tuvieron el cimiento de los derechos humanos, entendidos desde el escritorio y las aulas de naciones jóvenes, con los entendibles riesgos y utopías que ello conllevaba. Bajo esa premisa, esta investigación versará acerca del estudio y análisis de los discursos políticos de Thomas Sankara, expresidente de Burkina Faso en la primera mitad de los años ochenta, cuyo cuerpo ideológico contiene una amplia gama de elementos filosóficos en materia de derechos humanos, derechos de la mujer y autodeterminación de los pueblos, que no han sido abordados a profundidad por los académicos de Latinoamérica y que coadyuvará a despertar el debate académico sobre esta región. A lo largo de este trabajo se realizará una breve reconstrucción histórica de la llegada de Thomas Sankara a la presidencia del Alto Volta, hoy Burkina Faso, en los años ochenta, así como una corta biografía sobre el personaje estudiado.

RkJQdWJsaXNoZXIy MTY4MjU3