Derechos Humanos / Anuario Edición 2018

DERECHOS HUMANOS ANUARIO 2018 33 administrativa, esto pues, lógicamente, estás contribuyendo a que no exista corrupción. No puedes decir que vas a luchar contra la corrupción y mantener la secrecía bajo el mito de la seguridad. Y aquí también viene nuevamente la cuestión de la privatización; porque la privatización en los centros federales no es significativa por lo que toca a la corrupción de poca monta; pero ¿qué pasa?, se monopoliza la corrupción, que se lleva a niveles de los grandes contratos, entonces es otra forma de corrupción: es como comparar. No nos pueden orillar a colocarnos entre dos formas de corrupción, la poquitera, la centavera y la corrupción de alta escala; la corrupción a grande escala está en el sentido en que se desvirtúa la naturaleza de los centros penitenciarios, se les ubica en el lugar donde no deben estar ubicados, se construyen de manera sobrada e innecesaria, y se priva de recursos a otros programas para mantener centros artificialmente. El ejemplo más grotesco, es el “cps 16”, que te mencioné; es el modelo de corrupción “más limpio”, paradójicamente, que pueda haber. Es decir, está muy bien pintada, cien hectáreas, 99 edificios, todo totalmente en su lugar, excepto el centro mismo que no tendría por qué estar ahí, que está construido en un terreno inconstitucional pues siendo un centro para mujeres tendría que haber uno en cada entidad. Entonces, ese es un reclamo fundamental, eso es considerar a las mujeres que están ahí como objetos o mercancías, como objeto de comercio, y eso corresponde con la definición de formas modernas de esclavitud, donde se está instrumentalizando como mercancías, ¿para qué? Para tener un centro que pueda operar con números atractivos para la empresa privada, donde se vulneran los derechos de las mujeres que están ahí, por el hecho de removerlas lejos de su hogar. Es tan grande que, además, no la pueden utilizar y tienen que estar encerradas porque no hay personal para moverlas en el interior, entonces, se violan los derechos de ellas, se violan los derechos de su familia, se violan los derechos de los defensores, pero además ––y esto es algo que poco se advierte–– se violan los derechos sociales del resto de la población que se ven afectados, que se ven recortados, porque el servicio de esa deuda impone cargas muy fuertes al presupuesto anual y, dado que son contratos ya establecidos, pues esos son gastos etiquetados fijos que no pueden modificarse, entonces ahí hay un tema enorme. Desde el punto de vista de la corrupción, de ese crucero, el más grande que puede haber, digamos, un crucero así equivalente a Reforma e Insurgentes, entre corrupción y violación de derechos humanos; la corrupción y la violación de los derechos humanos en México se cruzan en Coatlán del Río, Morelos. Galilea Cariño: En los foros para la pacificación se mencionó que se realizaron algunos espacios de escucha en centros penitenciarios para atender necesidades de personas privadas de libertad, ¿cómo debemos mirar ese proceso? ¿cuáles crees que pueden ser los puntos nodales y qué tendencias hay para este nuevo sexenio?

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