DERECHOS HUMANOS ANUARIO 2018 131 Diría Alessandro Baratta: “la democracia es una ocasión favorable para reforzar los derechos de los niños y los derechos de los niños son o pueden ser una ocasión favorable para reforzar la democracia” (en García Ramírez, 2010, p. 14). No obstante, si bien la imposición de medidas paternalistas es razonable y deseable desde una perspectiva democrática, estas no pueden tener una justificación general para toda la niñez, ya que cada etapa en la vida del niño o la niña es distinta y estas deben atender a su desarrollo y capacidades. Como argumenta González Contró, “la minoría de edad no ha de considerarse como un bloque completo” (2006, p. 128). Conclusión Este ensayo se limitó a exponer brevemente algunas de las principales teorías y propuestas de fundamentación jurídica relacionadas con los derechos de la niñez, por parte de los más reconocidos autores y autoras en la materia. Hoy existe una infinidad de temas a tratar en la discusión jurídico–filosófica (e.g. salud y bioética, justicia transicional y globalización jurídica, tecnologías de la información, ciudanía y cosmopolitismo, género, movilidad humana, etc.). Sin embargo, la teoría y filosofía de los derechos de los niños y las niñas sigue siendo un tema poco explorado y de gran importancia actual. Es importante advertir que, si aún en la teoría persiste un debate sobre la justificación de los derechos de la niñez y lo que conlleva, en la realidad esta discusión es mucho más compleja y oscura. Los niños y las niñas enfrentan una universalidad de desafíos y requieren de todos los cuidados del Estado, las instituciones, la sociedad y la familia, quienes deben escucharlos y asegurarse del respeto y protección de sus derechos fundamentales y del principio elemental del “interés superior de la niñez”. Si bien decía Aristóteles que no hay nada más práctico que una buena teoría, entonces es importante que esta tutela a los derechos de la niñez no quede solamente en doctrina, textos normativos y foros académicos. El mayor problema de fondo cuando se tiene a la vista una decisión de amplio alcance o la resolución de un conflicto que atañe a niños y niñas es, de acuerdo con Sergio García Ramírez, “la necesidad de zanjar la difícil, compleja relación entre el poder (político o social) y el niño o adolescente; relación que tiene larga historia —tanto como la historia misma de la humanidad, desde la formación de los primeros núcleos familiares— y arraiga muy hondamente en convicciones y tradiciones, tabúes, rebeliones, liberaciones” (2010, p. 9). Consecuentemente, es fundamental comprender que este tema no solamente tiene implicaciones jurídicas, sino también sociales, políticas y culturales, por lo que es indispensable analizarlo desde un enfoque multidisciplinario que derive en acciones y políticas de protección efectivas. Finalmente, en las instituciones referidas no solo existe responsabilidad, sino deber. Los niños y niñas enfrentan una universalidad de desafíos y requieren de todos los cuidados del Estado, las instituciones, la sociedad y la familia
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