Multiplicación del trabajo y nuevos retos para la justicia social

60 de riesgos relacionados al carácter casual e independiente de esos trabajos: la sharing economy y la gig economy podrían ser presentadas como mercados basados en las plata - formas, lo que significa que empresas digitales controlan el acceso y la acción en estos espacios (por ejemplo, en términos de condiciones laborales) sin controles o equili - brios efectivos y evidentes; la formalización del trabajo en términos de freelancing o trabajador independiente evidencia la ausencia de protecciones sociales adecuadas (por ejemplo, en casos de accidentes o desempleo temporal), así que transforman la seguridad social en un asunto personal e incierto; la digitalización de la empresa jun - to con la fragmentación y externalización del proceso laboral transforma también las relaciones industriales, anulando las formas tradicionales de negociación colectiva. Este último punto nos lleva a considerar el desarrollo y las características de ejem - plos de relaciones industriales que se van configurando en la gig economy , al lado de esas investigaciones. La definición de organizaciones de trabajadores o sindicales, así como la sedimentación de acuerdos colectivos, pueden ser analizadas como formas de diálogo social entre diferentes actores con sus propios intereses y perspectivas. En - tonces, las relaciones industriales operan como espacio fundamental de explicación y discusión sobre el futuro del trabajo, especialmente en la economía de las plataformas. En efecto, la expansión global de los servicios de entrega de alimentos parece avanzar junto a la difusión de la emergencia de un sindicalismo urbano e informal. Es importante evidenciar cómo, en este sector, no existen previas relaciones industriales que pueden definir formas de organización, de protesta o de negociación, así que hay lugar para la innovación. Según Callum Cant, 22 en los dos años 2016–2017 se observó una ola expansiva de sindicalización de repartidores de diferentes ciudades europeas; esta ola presenta puntas de conflictos y periodos de calma. La organización colectiva de los repartidores varía desde grupos informales al apoyo de algunos sindicados tradicionales, 23 pero en cada caso se adoptan diferentes formas de acciones como las huelgas, el boicot y los bloqueos; estas prácticas parecen operar en el nivel material de las organización de los procesos laborales (huelgas), así como en el plano simbólico de la promoción de la empresa (boicot) y en los límites logísticos difusos del espacio urbano (bloqueos). En el contexto de tales movilizaciones, en octubre de 2018, en oca - sión del encuentro europeo en Brussels, se ha creado la Transnational Federation of Couriers, 24 como red entre diferentes organizaciones locales de repartidores. Además, las prácticas de conflicto han sido acompañadas por demandas legales y por la consti - tución de cooperativas de plataformas alternativas. Todas estas actividades atestiguan la difusa demanda de mayores derechos laborales y protecciones sociales. 22 Cant, The wave of worker resistance in European food platforms 2016–2017 . 23 Vandaele, Will trade unions survive in the platform economy? Emerging patterns of platform workers’ collective voice and representation in Europe. 24 Dif–Pradalier y Dufresne, Les territoires de la résistance aux plateformes. La naissance de la Fédération Transnationale des Coursiers . maurilio pirone